jueves, 5 de febrero de 2015

PARA PROTEGER EL DINERO

SANTA MARTHA PARA PROTEGER EL DINERO


MATERIALES

  •    Un chile colorado, grande
  •         Mostaza en grano 100 gr
  •         Incienso en grano 100 gr
  •         Esencia de Jazmin
  •         Una sábila pequeña
  •         Tres metros de listón rojo, angosto
  •         Velón dorado
  •         Siete alfileres

Hacer este trabajo en  la luna creciente, porque esta fase beneficia al incremento de dinero.

PROCEDIMIENTO

Rellene el chile colorado con los granos de mostaza y el Incienso en grano 100 con los alfileres una las dos partes del chile, hágalo con mucho cuidado para no romperlo. Posteriormente unja la ´sabila con el incienso de jazmín  y finalmente  con el listón una el chile,  la sábila y la estampa de Santa Martha de modo que forme una cruz.

Bendígalo tres veces diciendo: “SANTO CHILE, SABILA SANTA Y SANTA MARTHA YO LOS BENDIGO EN EL NOMBRE DEL PADRE DEL HIJO Y DEL ESPÍRITU SANTO PARA QUE EN ESTE HOGAR NUNCA FALTE LA PROVIDENCIA BENDITA DE DIOS Y EN EL NOMBRE DE LA TRINIDAD SANTÍSIMA, SE RETIRE CUALQUIER MAL”

Encienda el velón dorado y vele el trabajo.

A continuación rece la siguiente oración a Santa Martha

SANTA MARTA VIRGEN POR CARAMANCHEL VAS A CONSUMIR HOY POR LA LLAMA CON QUE SE ENCIENDE ESTA VELA Y POR EL ALGODÓN CON QUE SE LIMPIARON LOS SANTOS OLEOS TE ENCIENDO YO ESTA VELA PARA QUE REMEDIES MIS NECESIDADES, SOCORRAS MIS MISERIAS Y ME VENZAS TODAS LAS DIFICULTADES COMO VENCISTE LA FIERA BRAVA QUE TIENES A TUS PIES, PARA TI NO HAY IMPOSIBLES, DAME SUERTE, `PROSPERIDAD  Y DINERO PARA CUBRIR MIS MISERIAS Y NECESIDADES...

Cuando se haya terminado el velón, coloque el amarre detrás de la puerta de su negocio o de su casa. Cuando vea que el amuleto esté seco, cámbielo por otro, le debe durar tres meses, aproximadamente, en caso de marchitarse antes de ese tiempo, le aconsejamos dar una buena limpia a su hogar para eliminar las malas influencias que pueda haber.


lunes, 2 de febrero de 2015

VIRGEN DE LA CANDELARIA OYA


VIRGEN DE LA CANDELARIA

La Virgen de la Candelaria, Oyá o Yansá, como también se la conoce, es la divinidad que rige las tempestades, los tornados, los huracanes y las violentas tormentas que arrasan a su paso. Dicen que estos desastres naturales son el resultado de la ira de Oyá. También es la dueña de las plazas y los mercados. Representa la atmósfera y el aire que respiramos. Comparte con Changó, su esposo, el secreto del fuego y tiene poder sobre los espíritus de los difuntos.
Propicia los temporales, los vientos fuertes o huracanados y las centellas. Simboliza el carácter violento e impetuoso. En la naturaleza está simbolizado por la centella. Junto con Eleguá, Orunla y Obatalá domina los cuatro vientos. Se le llama con el sonido de la vaina de flamboyán. Representa la reencarnación de los antepasados, la falta de memoria y el sentimiento de pesar en la mujer. La bandera, las sayas y los paños de Oya llevan una combinación de todos los colores excepto el negro.

Representa la intensidad de los sentimientos lúgubres, el mundo de los muertos. Vive en las puertas de los cementerios, protegiendo y cuidando a los muertos. En el mismo momento que una persona muere, Oyá «baja» y le sacude su iruke (cola de pelo de caballo negro) en el rostro en señal de bienvenida al cementerio, limpiándolo a la vez de cualquier mala influencia. El difunto debe entrar purificado al reino de los muertos donde Oyá ejerce de cuidadora, sepulturera y portera.
Cuando alguien fallece, en las ceremonias yorubas dispensadas al muerto se solicita a una de sus hijas que baile el tambor. Oyá está directamente relacionada con el fenómeno de la muerte.
Oyá se sincretiza en la religión católica con la Virgen de la Candelaria, la Virgen del Carmen y santa Teresa de Jesús. Es la diosa del río Níger y las tallas de madera que la representan lo hacen con nueve cabezas alusivas a las nueve desembocaduras de dicho río. A Oyá pertenece todo el cobre que existe en este planeta. Las herramientas de esta Orixá son una corona de nueve picos de la que penden nueve piezas que simbolizan el trabajo, la vida y la muerte. Entre sus atributos está una careta hecha de cobre que representa el carro de la muerte, un rabo de pelo de caballo negro, dos espadas desenvainadas y los cuernos de un búfalo.
Los collares más comunes de Oyá suelen confeccionarse con cuentas de color marrón. En los banquetes que se le ofrecen hay profusión de flores naturales multicolores, la mesa se cubre con un mantel rojo púrpura y los platos de ofrenda son blancos. Le gusta el arroz blanco sazonado, las berenjenas crudas o guisadas, los aguacates, los frijoles, la yuca y las granadas. Oyá se abstiene de comer carnero y manteca de corojo.




Los cantos ofrecidos a Oyá son de una belleza poco frecuente. Graves y solemnes, casi siempre invocan la justicia y la paz. Sus bailes son vertiginosos, arrogantes, convulsivos y violentos. De movimientos rápidos, fogosos y sensuales, muestran su voluptuosidad cargando simbólicamente al iruke con el fuego purificador que servirá para limpiar a todos los que se hallen a su alrededor. En el baile, el cuerpo se desliza girando siempre hacia la izquierda formando remolinos.
Los hijos de Oyá suelen ser autoritarios, poderosos, voluptuosos y sensuales. Son terribles e imprevisibles sus reacciones frente al enfado, sobre todo cuando dicho enfado es producto de los celos. Son tremendamente fieles cuando están enamorados y seguros de la correspondencia de su pareja pero, ante un resquicio de duda, pueden manifestarse como personas infieles y sumamente promiscuas.